domingo, 25 de mayo de 2008

ME ABURRO

El sábado (ayer) salí de trabajar a las 4 de la tarde. Prescindí de la siesta reglamentaria, decisión que luego acabé pagando sin poder ver a Rodolfo Chikilicuatre en Eurovisión, y me dirigí a Astillero. A jugar el partido semanal con mis amigos.

Siendo fieles a nuestras costumbres, a las 5 menos cuarto, la hora en que se había fijado la convocatoria, no había nadie en el campo. Bueno, para ser justos había uno. Javi Rodríguez.

A mi ya no me extraña nada así que esperé 5 minutos en el coche hasta que apareció César y juntines nos encaminamos a los vestuarios. Nos cambiamos y saltamos al césped a pelotear un poco. Ya éramos 7 personas y al tiempo se nos echaba encima, no pensé que al final pudiésemos jugar el partido.

Pero poco a poco fue llegando el personal. A las 5 y 5 había 14 tíos para jugar el partido. Unos vestidos y en el campo, otros en el vestuario y otros por ahí dando patadas a los balones. En definitiva había partido aunque cómo de costumbre éramos impares y tuvimos que echar mano del hijo de Ramón.

No habían pasado dos minutos de partido cuando apareció otro jugador que se había traído a un nuevo amigo para jugar y se pusieron a jugar. Si ya antes a algunos se les hacía el campo pequeño, ahora ya solo se oían voces pidiendo agrandar el campo.

A mi se me ocurrió la brillante idea de que mejor que agrandar el campo y hacernos la picha un lío con las líneas, bien podíamos cambiarnos de campo e ir a jugar a la otra mitad del campo, que es más grande. No hay redes detrás de la portería y el balón acaba en la fábrica con frecuencia, pero el campo tiene unas dimensiones mayores que el del otro lado.

Así lo hicimos, no sin alguna dificultad estratégica (somos muchos jefes y pocos obreros) y continuamos el partido. Un partido de 8 contra 8 que requería grandes dosis de disciplina táctica para que el partido no se convirtiera en un correcalles.

Pero he aquí mi sorpresa cuando a los 15 minutos de partido aparecen en el horizonte dos tíos más, acompañados de sus familias, dispuestos a jugar el partido. Pero lo peor no fue eso sino que viendo las dudas que tenían de calzarse las botas o no, se les invitó con júbilo a participar de la fiesta.

Resultado, 9 contra 9 y a jugar. Hasta entonces todo iba normal, fue en ese momento cuando empezaron mis problemas. No había manera de colocar a la gente, cada uno corría como una gallina ciega detrás del balón o del rival más cercano (eso el que corría). Cuando teníamos el balón no se movía nadie. Para ser más exactos, nadie bajaba a pedirla para jugarla, los delanteros (los muchos que teníamos) se iban a la frontal del área rival y desde allí la pedían. Si se la echaban malo porque se perdía el balón y si el que la tenía avanzaba con ella regateando peor porque también se perdía el balón pero además en posiciones más peligrosas.

Fueron cayendo los goles en nuestra portería. Ya que el otro equipo, sin ser ninguna maravilla, al menos tenía cierto criterio a la hora de jugar al fútbol. Con el 3-0 en contra decidí abandonar la portería y participar activamente en el juego.

No vi la magnitud de mi error ni siquiera cuando el que se me ofreció gentil y voluntariamente para relevarme fue Rubén. No cabe duda de que él ya había visto que el desastre era inevitable.

Viendo donde estaba jugando cada uno me dije. Ponte de delantero y a ver si puedes dejar algún balón de cara a los que se incorporen al remate. Pero a pesar de que iba de amarillo chillón debía de ser invisible porque no recuerdo que nadie me pasase un balón en diez minutos.

Deduciendo que no se trataba de ninguna manía personal ni era debido a que el otro equipo marcase en zona a los demás y al hombre a mi pensé: “Baja a pedirla para iniciar y a ver si puedes meter algún balón en profundidad para las 3 o cuatro balas que tenemos en punta según la jugada”

Pero tampoco dio resultado, los defensas de mi equipo eran presionados por los defensas rivales y no veían la ventaja que podría suponer dármela estando yo de espaldas, para que se la devolviese a ellos y jugasen otra vez de cara. No se lo reprocho, debieron pensar que yo iba a hacer lo mismo que el resto de amarillos. Recibir de espaldas con un contrario pegado, darme la vuelta e intentar avanzar a pesar de la oposición de mi marcador. ¡A cabezazos y mochando si era preciso! Pero p’alante.

Total que no sabía dónde ponerme y cada vez me aburría más. A todo esto los rojos ya nos ganaban por 5-0 porque ellos seguían a lo suyo. Jugar al fútbol y marcar goles. Igual que nosotros, que también seguíamos a lo nuestro. Cada uno la guerra por su lado y perder balones, luego de bajar a defender si nos acordábamos bien y si no pues nada, ya nos volverán a hacer llegar la pelota y volveremos a intentar regatear a un par de ellos. Digo intentar porque no recuerdo haber visto un regate de ninguno de los maradonas amarillos.

Ya lo llevaba rumiando 10 minutos pero fue entonces cuando me decidí a abandonar el campo y emprender el camino de los vestuarios antes de tiempo. Algunos me pidieron continuar pero la decisión ya estaba tomada. Ni me veía ni me veo con fuerzas ni ganas de decir a nadie lo que tiene que hacer y sobre todo, lo que no tiene que hacer jugando al fútbol. Además unas correcciones de ese tipo a quién no ha jugado “profesionalmente” a esto, solo pueden provocar sensaciones alucinógenas en el que las recibe. Algo así como ¿Qué me dice este tío? ¿Qué sabrá este lo que tengo que hacer? o todavía reacciones peores como ¡Déjame en paz! o ¡Yo juego como quiero!, etc, etc, etc.

En este último supuesto y con mi paciencia ya agotada muchos minutos antes el problema hubiera sido mucho más grande que el simple abandono del partido y el “Ahí os quedáis”. De verdad que ni siquiera me fui enfadado, solo estaba muy, muy, pero que muy aburrido y decidí marcharme antes de que me hirviese la sangre y entonces si que me hubiese metido en el partido con todas las consecuencias.

Mi parte de culpa es que ya no tengo el humor que tenía. Es cosa de la edad y sobre todo de la forma física. Hace años hubiese sido diferente, habría corrido en pos del balón y habría hecho alguna jugada de cierto mérito. Pero ahora, en mi estado físico solo puedo jugar con gente que juegue. Es decir, si no corro al menos me tengo que rodear de gente que lo haga, o mejor todavía, de gente que no lo haga pero que sepa pararla y devolverla. Aunque solo sea el 40% de las veces.

Y eso señores en precisamente lo que brilla por su ausencia en mi equipo. Aquí no la devuelve ni San Pedro. Una pared nadie sabe lo que es, solo identifican (identificamos) esa palabra con un amontonamiento de ladrillos. Un balón atrás y un desmarque es ciencia-ficción para nosotros. Y así puedo continuar casi hasta el infinito. No somos todos los que jugamos así, pero cada vez somos más y así lo único que hacemos es correr a lo bobo (el que corre) y aburrirnos mucho todos (los que corrren y lo que no).

No espero que nadie esté de acuerdo conmigo, ni siquiera que me comprenda. Solo expreso el por qué de mi retirada en el partido de ayer y lo que sentía en esos momentos. A mí me toca escribir las crónicas de los partidos y a vosotros os toca leerlas, si es que habéis llegado hasta este punto sin aburriros y marcharos. Creedme si os digo que si hay alguien que entienda que os aburro y no habéis leído hasta el final, ese soy yo. A mí ayer me pasó exactamente lo mismo.

¿Me entendéis ahora mejor?

P.D: Por teléfono se me comunicó que el resultado final había sido de 5-1 a favor del equipo rojo. Yo me fui con el 5-0 en contra, así que a lo mejor y en vista del resultado parcial desde que me marché, el problema soy yo. Si es así la solución es facilísima.

¡¡ULTIMA HORA!!

Michel ha presentado su dimisión irrevocable cómo tesorero, utillero, jefe de prensa y capitán del equipo amarillo. Estaba caliente después del partido (eso le pasa por no pirarse como yo y aguantar en el campo hasta el final) y en vista de que nadie se quería hacer cargo de los balones, de los “objetos olvidados” ni de lavar la ropa. Michel optó por mandarlo todo a tomar por culo y dimitir de todos sus cargos.

Así pues Michel abandona los terrenos de juego. Ya no irá más a jugar, no llamará ni pasará e-mails para las convocatorias y por supuesto no se hará cargo de los balones ni de la ropa y diversos objetos que la gente se deja olvidados en los vestuarios una semana si y otra también. De hecho ayer después de tomar esa decisión cogió todo lo que había en la bolsa que no era suyo y lo tiró al contenedor de la basura. Ya verás como el próximo día alguien pregunta por el pantalón blanco, la camiseta naranja, las rodilleras, el champú, etc.

19 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Qué fue del Michel se queda, Michel no se vende?

¿Es una estrategia como la de Cristiano Ronaldo?

Michel es junto a César y a Manute el alma del fútbol de Telemaigos, no puede abandonar al barco. ¿Qué va a ser lo siguiente? ¿Cerrar la página de Teleamigos?

Anónimo dijo...

Uno de los rojos cambió de equipo, por eso la cosa se quedó en 5-1 y no pasó a mayores

Anónimo dijo...

Ese uno que se puso de amrillo no es otro que César, que ya se ha ofrecido para jugar de portero con los amarillos ya que Manute cubrirá el lateral derecho.
Así tendré más oportunidades de ir a la próxima Eurocopa.

Animo a Michel para volver con los rojos y cambiar de rutina.

Saludos

el gato de frajanas.

Anónimo dijo...

Después de lo de Marcelino, lo de Michel ha sido un duro golpe. Por favor si Don Miguel no cambia de opinión os ruego que no me madeis más emilios, que no vuelvo más.
UNO QUE VA SIEMPRE.......Chisco.

Anónimo dijo...

joder manute, yo que estaba esperando ver la alineacion para ver si habian ido los que faltaron el otro dia y me encuentro con este lio montado.
1- el marcelino
2- el michelin
3- el manutin
tanto festival de eurovision y la que habeis montado.
Yo creo que lo mejor es que quedemos el viernes y con tranquilidad arreglemos estos asuntos, bueno los que se puedan. Lo futbolistico creo que esta jodido de arreglar.

viva michel y manute
viva la sangre caliente
el viernes al mejicano coño

fdo:maxi

Anónimo dijo...

A mi antes me decír quienes van para confirmar asistencia o no, aunque como iremos los mismos de siempre iré.
Fdo. Michel.

Anónimo dijo...

Aclaración:
Por supuesto estoy hablando de la cena del viernes, que quede claro que a los partidos no vuelvo.
Fdo. Otra vez michel.

Manute dijo...

Para Maxi.

Rojos: César, Laury, Juan, Ramón, Eloy, Óscar, Juan (internacional por Ecuador)Luisman y Adrián.

Amarillos: Manute, Michel, Carlos, Darwin, Juhinho Pernabucano y Juniniho de Pernambuco (Los cuatro últimos también internacionales por Ecuador, Rubén, Javi Rodriguez y Abrahan.

Cómo verás dos pedazos de equipos.

Anónimo dijo...

Muy bueno lo de Junino muy bueno,

Anónimo dijo...

que buena planta tenia el ultimo fichaje de los amarillos,pero pa la pasarela cibeles....michel vuelve, no se que sera de nos.,prometemos no volver hablar javi y mi menda,es mas por mi ni le vuelvo a mirar...todo sea por volver a disfrutar de tu futbol,ademas creo que chicao tiene una oferta de los amrillos...sabeis algo????

Anónimo dijo...

Yo tambien me doy por aludido, reconozco mi falta de criterio y calidad y prometo hacer caso y callar!
Me declaro en huelga hasta que regrese Michel.
De todas formas como ya decía algún entrenador,el domingo cambiaría a todos,el martes ya dejo a 2,el jueves me vale medio equipo y al domingo siguiente juegan los mismos porque no hay mas.
Los que puedan que hagan caso,al mexicano y tequila para todos.

Saludos, Javi.

Anónimo dijo...

No sabeis que cojones inventaros para ir de cena, que si setas, que si mexicano, vosotros lo que sois es unos castañas.
Fdo. Un fijo de los viernes

Anónimo dijo...

Vamos a ver! ¿que pasa con los castañas?.
Fdo. Michel

Anónimo dijo...

No compato la decisión de Michel al 100% aunque le entiendo al 200%.

No obstante creo que los que todavía tenemos un poco de autoridad moral con él (dos o tres de nosotros) a lo sumo, deberíamos hablar con él para intentar que recapacite.

El resto creo que lo más prudente es que permanezcan calliditos sin dar su opinión. Una opinión que no es que no sea inteligente y reflexiva, solo que no es relevante en este caso que nos ocupa.

Fdo: Pitufo filósofo

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo con la reflexión de Pitufo.
Fdo. Michel.

Anónimo dijo...

Eso Eso, cumbre de capitanes!!!!!!!
Que recapaciten.

Anónimo dijo...

pitufo borde ,y creido,hablaremos o daremos la opinion si nos sale de donde sea...otra cosa es que nos haga caso...y si no dar una clave privada para vos.

Anónimo dijo...

Por mi podéis opinar dónde y cuando queráis. Yo solo lo decía para evitar que Michel os tenga que mandar a tomar por culo.

A mí, cómo a él, lo que opines me suda mi pitufopolla.

Fdo: El pitufo

Anónimo dijo...

Saaaaaangreeeeeeeeeeeeeeee!!!!!!