EFEMÉRIDES

El 15 de marzo ha sido el cumpleaños de Gema. Como corresponde a una dama de su estilo y elegancia no diremos aquí su edad. Nos limitaremos a felicitarla como se merece después de tantos y tantos años juntos.

Da igual que se casase con Fermín, llevaban tantos años juntos que Gema era un poco la novia de todos. La chica que nos daba su opinión sobre nuestras chicas o cualquier otra cosa, siempre con sinceridad y con mucho criterio. Lógicamente a ella no le cegaba la pasión como a nosotros cuando estábamos cerca de alguna. Por eso su opinión era y sigue siendo tan importante, porque es la única que en ciertas ocasiones consigue mantener la cabeza fría y dar buenos consejos.

Gema ha pasado tantas cosas con nosotros que es uno de los nuestros. Con doble mérito si cabe, porque aguantarnos a nosotros con 20 años es una proeza de gran calibre, pero aguantar al Min entonces, ahora y firmar con él para siempre es indescriptible.

La chavala dio muestras de su infinita paciencia y sentido del humor en la primera cita que tuvo con nosotros. El día que en Solares conoció a Fermín, a Michel y al “difunto” Julio Pelayo. Se conocieron por motivos que no viene al caso y estuvieron pasando la tarde del domingo en Solares tomando copas. En un momento dado Julito desapareció (más o menos como aquella vez que se mosqueó y aterrizó en Málaga, o eso dijo). A Fermín le dio un aire o se mosqueó (que cada uno elija la opción que crea más probable) y se piró a Santander a dedo porque ya no había trenes. Cualquier cosa antes que volver y tener que dar una ostia al primero que se riese.

En definitiva que a última hora Gema se encontró sin amiga con coche para volver a casa y sola con un tío que acabada de conocer y se ofreció gentilmente a llevarla a Santander. Ese hombre era Michel, que cuando estaban a la altura de lo que actualmente es la Selva Negra, paró el coche en la cuneta, quitó las llaves del contacto y le dijo: “Ahora bájate del coche”. La muchacha no daba crédito a lo que oía pero ante la insistencia de Michel acabó por creer que lo que le estaba pasando era verdad. A Michel se le ablandó el corazón y el dijo entre risas que era una broma. Si entonces Gema no le dio una ostia se entiende como en todos estos años no nos las haya dado a ninguno de nosotros a pesar de que nos las hemos merecido en múltiples ocasiones. Y que le quede claro que nos vamos a seguir mereciéndolas por mucho tiempo.

Ese fue el inicio de una gran amistad (como en Casablanca), de muchos buenos momentos en los que nos lo hemos pasado muy bien todos juntos. Una amistad que se ha visto reforzada cada día que ha pasado. En fiestas de Nochevieja, en cenas, en noches de marcha, como el día que Fermín se caía de sueño y por seta le tuvimos en la calle Panamá agobiado en la discoteca esperando a que nos cansásemos de bailar y en un largo etcétera de ocasiones.

No vamos a contar aquí y ahora todos los momentos que hemos pasado con ella. Solo queríamos felicitarla y así lo hacemos con un gran beso y deseándole que cumpla muchos más pero estando siempre con nosotros.

¡¡Muchas felicidades Gema!!

¡Te queremos!

P.D. Mucho hablar, mucho hablar pero no tenemos ninguna foto de Gema. ¡Vaya amistad de los cojones! Le vamos a poner como homenaje una foto de David, que seguro que le gusta igual y nos perdona el fallo (como siempre).